Un Año Se Va, Uno Nuevo Comienza

Extracto del Boletín Semanal


Diciembre 30, 2016

Un Nuevo año que se va, uno Nuevo que comienza, ¿Que nos depara este año? No lo sabemos,

Del hoy o del mañana solo nuestro Señor sabe.

Alguien dijo: “Solo existen dos días en el año en los que nada puede ser hecho, uno se llama ayer y el otro mañana por lo tanto hoy es el día ideal para amar, crecer, hacer y principalmente vivir para El.

Pero si sabemos que su venida esta a las puertas.

¿Será este el año en el cual el Señor venga?

El año que se va hemos tenido tristezas y alegrías, el viento ha soplado sobre nuestras vidas y sobre la vida de la Iglesia con fuerza de tornado, muchas veces ha quedado devastación alrededor.

Cuando ha llegado la alegría, nos hemos gozado y también hemos logrados triunfos,

Hemos sentido la presencia maravillosa del Espíritu Santo en medio nuestro.

Hemos visto sanidades, almas sanadas, almas liberadas, hemos tenido el privilegio de ver almas pasando de muerte a vida, Hemos sido testigos de su amor infinito por cada uno de nosotros.

Hermanos que amamos, han quedado en el camino otros perseveran, continúan adelante, a pesar de…

Porque no están mirando lo que les rodeas, sino que están mirando el blanco perfecto, como dice la escritura: “Puestos los ojos en Jesús el autor y consumador de la fe” (Hebreos 12:1)

En la mayoría de nosotros, los que amamos a Jesús, esta el deseo quemante en nuestros corazones, de ver el poder de Dios derramarse sobre esta nación de Australia, y ver realmente al pueblo consagrarse y aprender a vivir en santidad, porque recuerde que la Palabra dice: “Sin Santidad Nadie Vera Al Señor”.

Que este año nuevo que comienza traiga a nuestras vidas un despertar poderoso un derramamiento del Espíritu Santo un bautismo que nos convenza de Pecado, Justicia y Juicio y sobre todas las cosas, que llene de amor a su Iglesia, para que podamos ver la oración de nuestro Señor contestada,

“Yo ruego por ellos; no ruego por el mundo, sino por los que me diste; porque tuyos son, y todo lo mío es tuyo, y lo tuyo mío; y he sido glorificado en ellos.
Y ya no estoy en el mundo; mas éstos están en el mundo, y yo voy a ti. Padre santo, a los que me has dado, guárdalos en tu nombre, para que sean uno, así como nosotros.
Cuando estaba con ellos en el mundo, yo los guardaba en tu nombre; a los que me diste, yo los guardé, y ninguno de ellos se perdió, sino el hijo de perdición, para que la Escritura se cumpliese.
Pero ahora voy a ti; y hablo esto en el mundo, para que tengan mi gozo cumplido en sí mismos. Yo les he dado tu palabra; y el mundo los aborreció, porque no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. No ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal. No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad.
Como Tú me enviaste al mundo, así yo los he enviado al mundo. Y por ellos yo me santifico a mí mismo, para que también ellos sean santificados en la verdad. Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste.
La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno. Yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca que tú me enviaste, y que los has amado a ellos como también a mí me has amado.
Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy, también ellos estén conmigo, para que vean mi gloria que me has dado; porque me has amado desde antes de la fundación del mundo.
Padre justo, el mundo no te ha conocido, pero yo te he conocido, y éstos han conocido que tú me enviaste. Y les he dado a conocer tu nombre, y lo daré a conocer aún, para que el amor con que me has amado, esté en ellos, y yo en ellos”.

Que Dios les Bendiga ricamente y que este Nuevo año sea portador de toda la Paz, el amor, la salud, y la prosperidad que ustedes se merece.

Cursiva y negritas son exclusivamente del autor

Con amor
Ps. Maria Varjabedian